SONIDO, VIBRACION Y GONG

En este planeta, y en sus diversas culturas, la conexión entre ellas se realiza a través del sonido. ya sea a través de la voz o con instrumentos sonoros. El sonido produce vibración y esa vibración llega a todos los lugares.

La vibración no sólo llega repercutiendo en nosotros y en quien nos rodea sino también influye en el planeta. Todo el universo se encuentra en estado de vibración.

Los objetos vibran a una frecuencia de forma natural que se denomina resonancia.

Cuando hacemos sonar un instrumento o la voz en una frecuencia que corresponde a un objeto, este vibra y resuena en muchos casos haciéndose audible o visible como efecto de esa vibración.

Cuando proyectamos un sonido adecuado (p.ej. con un gong, cuenco, etc.) hacia una persona, se puede crear una resonancia o efecto armonizador en dicha persona.

En como afecte esta vibración también depende de la intención de quien lo emite. Es la suma de intención y frecuencia.

En todas las culturas y sus rituales utilizan el sonido para elevar y subir la conciencia.

Otro aspecto relevante relacionado con el sonido y la vibración es la escucha tanto interna como externa.

Si practicamos la actividad de escuchar en vez de la de oír, tomaremos conciencia de todo un mundo que nos espera dentro de nosotros y así abrirnos al sonido interior.

El Naad yoga se practica desde la antigüedad sobre todo en la India. Es a través del sonido tanto con la música (ragas) como con los mantras (textos sagrados) o juntos, cuando se producen vibraciones sonoras que actúan en nuestro cuerpo armonizándolo a nivel físico como emocional.

Con estas formas de armonización se trata de afinar y equilibrar nuestro ser.

Los cuencos, instrumentos de cuerda, tambores, monocordes, voz, etc, son instrumentos con gran riqueza en armónicos que actúan en nuestro cuerpo con sutileza e intensidad.

También los gong con su presencia y fuerza envolvente nos llevan a un estado de profunda conciencia.